Alberto Soler: "En una situación de bullying necesita ayuda tanto la víctima como quien agrede"

València

Alberto Soler, psicólogo y experto en acoso escolar, analiza la realidad del acoso sexual en los centros escolares. Matiza que en los centros docentes se diferencia entre el propio centro escolar y el profesorado. Y es que en ocasiones los centros escolares tienen ciertas reticencias para activar los protocolos sobre acoso escolar por miedo a que llegue a la inspección educativa o a las familias. Ve muchas diferencias con la respuesta del profesorado que suele ser mucho mejor ante casos de acoso.

Y es que Alberto Soler, que acaba de publicar con Concepción Roger el libro Hoy jugamos todo. Un cuento para prevenir el bullying, precisamente para trabajar el bullying como herramienta tanto para las familias como en los propios centros educativos, denuncia las trabas burocráticas interminables en los centros escolares que impiden poder activar los protocolos con diligencia, y denuncia que tenemos un sistema educativo muy burocratizado y un cuerpo docente con mucha carga burocrática al que no le queda tiempo para activar el protocolo contra el acoso escolar, pues saben que les va a consumir mucho tiempo y no pueden ejecutarlo.

Es libro está centrado en la etapa de primaria para detectar estás conductas que tienen unas dinámicas muy definidas para catalogarlas como acoso escolar: la desproporcionalidad, la sistematicidad y la intencionalidad.

El acoso escolar va más allá del daño físico. El bullying afecta a todas las partes, tanto a la víctima como al acosador o acosadora, y las familias pueden no estar al tanto de lo que ocurre en esa situación. Según Alberto Soler, nos debemos quitar de la cabeza el estigma que los menores agresores vienen de familias desestructuradas, pues no es la realidad.

En una situación de acoso escolar, en la inmensa mayoría de los casos termina con el abandono del centro del menor agredido del centro. Es difícil reconducir la situación, pero si no se trabaja con esos agresores, aunque se vaya la víctima, puede llegar uno nuevo. Necesitan una actualización del decreto actual y conocer el texto sobre el cual se está trabajando para conocer las modificaciones con respecto al contenido de esta nueva ley. Y es que la semana pasada, el Consell aprobaba la tramitación de urgencia del proyecto de Decreto de Convivencia en el Sistema Educativo Valenciano con el fin de dotar a la comunidad educativa de una normativa clara sobre los procedimientos, derechos y obligaciones en esta materia.

La tramitación urgente está justificada principalmente por la falta de desarrollo del vigente decreto de 2022, lo que provoca que los protocolos que se aplican están basados en una orden de 2014, provocando en algunas ocasiones confusión y dificultades en la aplicación de procedimientos ante situaciones que alteran gravemente la convivencia en los centros educativos.

Desde la GVA, Cristina García, Jefa de Servicio de Convivencia de la Conselleria d'Educació, asegura que se está trabajando en la simplificación administrativa para las direcciones y titulares de los centros educativos, de los procedimientos vinculados ante conductas gravemente perjudiciales en la convivencia.

Por otra parte, ha comentado en los micrófonos de Radio Valencia que, atendiendo a las demandas y necesidades de los centros educativos y de la sociedad actual, el futuro decreto de convivencia en el sistema educativo valenciano abordará diferentes aspectos no contemplados en el Decreto de 2022, como el derecho a la protección, información, apoyo, asistencia, atención y reparación de las víctimas, el derecho a reunión del alumnado o el reconocimiento social, institucional y legal de la autoridad del profesorado, entre otros.

Otros puntos que recogerá el nuevo texto son: la prevención, detección precoz, protección y reparación de situaciones o acciones violentas que pueden perjudicar el bienestar del alumnado y la protección contra toda forma de violencia, incluida la que se ejerce con las nuevas tecnologías o la regulación del uso de los dispositivos móviles (actualmente recogida en una resolución y de aplicación desde mayo de 2024).

Alberto Soler ha puesto como ejemplo a la Comunidad de Madrid, pues "está avanzando mucho en esta regulación", y de cara al curso que viene ya implantará en sus aulas las recomendaciones que se desprenden de un informe con indicaciones muy claras sobre el uso de dispositivos en las aulas. Y es que la falta de regulación en el uso de dispositivos móviles afecta a la convivencia , atención y rendimiento académico.

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