Una doctora da las claves para retrasar el envejecimiento: "Hay que incorporar especialistas en la sanidad pública"

Madrid

El envejecimiento es un proceso complejo que va más allá del simple transcurso del tiempo y está condicionado por el estilo de vida de cada individuo. Aunque la genética influye, son principalmente los hábitos diarios los que determinan la calidad de vida en la edad avanzada. En un contexto donde el sedentarismo y las conductas poco saludables están cada vez más presentes, resulta fundamental entender qué aspectos pueden favorecer un envejecimiento activo y saludable.

La genética influye aproximadamente en un 25% en el envejecimiento promedio, mientras que el 75% restante depende de los hábitos de cada persona. "La actividad física es clave, es la base de todo los demás. Somo una sociedad muy sedentaria y realizar ejercicios de movilidad y fuerza es de vital importancia para mantener una buena salud a medida que envejecemos", ha comenzado explicando en La Ventana la doctora y autora de ¿Envejeces o rejuveneces? Sari Arponen.

El ser humano necesita actividad por naturaleza y poco a poco con los avances tecnológicos y la evolución del estilo de vida se ha ido alejado de esa necesidad que tiene como especie. "Si vas al gimnasio media hora y el resto del día no haces nada no es suficiente. Caminar solo tampoco lo es, necesitamos darle al cuerpo más resistencia cardiovascular, movilidad y fuerza. Nos tenemos que esforzar de verdad, buscar aumentar la masa muscular que a partir de los 25 años comencemos a perder", ha manifestado la doctora.

Pero esto no solo aplica a los adultos o personas de edad avanzada, "los también niños se tienen que mover más y comer más sano, es un problema. La educación física que hacen en el colegio no es suficiente. En España es muy fácil llevar una dieta mediterránea sana y debemos hacerlo", ha comentado Arponen.

Un buen estado físico es crucial para tener un buen envejecimiento, pero igual de importante o más es envejecer bien cognitivamente, "evitar el alcohol o el tabaco, la alimentación y el ejercicio son claves. Pero también es necesario mantener cierta curiosidad y seguir enfrentándonos a retos para mantenernos estimulados, como aprender un nuevo idioma o no usar la calculadora para hacer cuentas básicas", ha explicado la doctora.

Sin embargo hay una actividad en concreto que es muy beneficiosa en el mantenimiento físico y cognitivo de las personas de avanzada edad: "La actividad que más ayuda después de la jubilación es tener una huerta", ha expuesto Arponen.

Aunque hay otro aspecto importante que no se suele relacionar con la salud cognitiva y también tiene mucho que aportar, "en la reserva cognitiva entra en juego las relaciones sociales, somos un animal social y la soledad pasa factura con lo años", ha comentado la doctora.

Todos estos pequeños cuidados a diario pueden contribuir a "revertir la vejez" en la gran mayoría de casos, "todo el mundo puede mejorar en algo, sobre todo en el ejercicio físico", ha explicado Arponen.

Sin embargo, para potenciar estos efectos es necesario integrar el conocimiento de nutricionistas, dentistas y psicólogos, y "evitar a los médicos". "Para saber como estamos por dentro de salud no es necesario acudir a un médico a veces entramos en un sobrediagnóstico. Todo lo que se lleva la extremo es mala, no podemos vivir constantemente pensando en como no morir", ha finalizado la doctora Sari Arponen.